lunes, 23 de febrero de 2015

St. Valentines Weekend. (+202, -112)

 ¡Feliz lunes, o mates si me leéis de España! Creo que esta entrada llega un poco tarde, pero es lunes y sinceramente es cuando más cómodo se me hace publicar. Espero que disfrutéis de la lectura, y no doy más la vara con la introducción que es tarde y la cabeza no me da para tanto. 





 El viernes, sobre las 5, llegó Ichi a casa, y mientras que ella hacía Skype con sus amigas yo me dediqué a bloggear. Un par de horas después llegó Natasha, la estudiante de intercambio rusa. Pedimos una pizza y mientras cenábamos estuvimos un ratiño de palique, hasta que vino Llarina. 
 Estuvimos bailando con el Just Dance y luego hicimos tie dye, que creo que ya explicara lo que era, pero por si acaso me repito: se trata de teñir camisetas con una especie de pigmento, y acaban quedando estampados psicodélicos. Si queréis ver un ejemplo, podéis hacer click aquí. Cuando acabamos, vimos Scary Movie 5. Bueno, "vimos" entre comillas, porque la rusa y Llari se quedaron sopa en menos que canta un gallo. De la película prefiero no hablar demasiado, porque fue una basura comparada con cualquiera de las anteriores, que ya no son precisamente obras maestras.

 El sábado me levanté sobra las 9, me di una ducha y preparé las camisetas mientras que las otras dormían. Las desperté al poco rato y nos fuimos con Lee, David y Angie a desayunar a Galaxy Diner, el típico lugar de película, con camareras con acento y sillones acolchados. Acabamos con los estómagos a punto de explotar, pero valió la pena. Tras eso, acercamos a Decatur a Llarina e Itziar, y Natasha y yo fuimos de compras a North Lake, el centro comercial que queda a menos de quince minutos- si el tráfico lo permite- de mi casa.

My favourite person in the whole world.
 Una vez de vuelta, estuvimos hablando con Olivia y un amigo de Angelina, que pasaron aquí la tarde. Preparamos brownies y despedimos a mis host parents, que se marcharon a las seis a jugar a las cartas a casa de unos amigos. 
 Cuando el niño este del que no me acuerda el nombre se fue, Angie y Livvy estuvieron a su rollo, y nosotras nos pusimos en plan San Valentín a ver comedias románticas. No es mi género favorito, pero el hecho de ver Perdona si te llamo amor en ruso con subtítulos en español y Tres metros sobre el cielo en versión original subtitulada en inglés hizo que valiese la pena. Tras tanta pastelada, tocó lo bueno de verdad: Spirited Away (en castellano, El Viaje de Chihiro, de Miyazaki. Yo no soy una persona amante de los animes japoneses, pero esta película me engatusó desde el primer momento y si tenéis la oportunidad, recomiendo que la veáis. 

 La host family de Natasha vino a recogerla el domingo a las 10, y yo ya no me volví a la cama. Creo que fue un día bastante productivo, pues me lo pasé haciendo deberes atrasados, leyendo y viendo AHS: Murder House. Se puede decir que me gustó lo suyo, pues en un día me devoré más de la mitad de la temporada. 

 El lunes no tuvimos clase porque fue el Día del Presidente. Estos americanos... Quién nos vería a nosotros con un día dedicado a Rajoy. Por la tarde, vinieron Emma y Kevin a cenar, porque era el cumple de este último. Se tuvieron que marchar bastante pronto, pero Lee hizo unos espaguetis con peperoni que estaban para chuparse los dedos. 



 Cerca de las diez de la noche, nos enteramos de que nos habían cancelado las clases para el martes por riesgo de hielo en la carretera. En mi condado, Dekalb, la tormenta no hizo grandes estragos, pero por fotos que pude ver de otros exchanges students de la zona, quedó todo echo un cuadro. Y de bonito, eh. Tenéis la prueba aquí y aquí. No tengo queja, un día menos sin clase siempre está bien, pero yo hubiera preferido que la causa fuese una nevada. Me acabé la segunda temporada de AHS y empecé la tercera, con la que aún estoy a ello.

 La primera clase de tanto el miércoles como el jueves me la pasé ayudando en la oficina a mi counselour. Nada del otro mundo, pero la profe me recomendó para ello y me hizo estar más feliz que una perdiz todo el tiempo. 
 Ambas tardes, las actividades extraexcolares fueron canceladas. Desde mi punto de vista fue un poco estúpido, porque no hacía tanto frío, pero que se lle vai faser.
 No sabía si decir esto o no, pero bueno, ¿qué más da? Por la noche fuimos al supermercado y perdí la cartera, con $200, mi tarjeta de crédito y mi carnet de CIEE dentro. Estaba desesperada, pero llamamos a Atención al Cliente y nos dijeron que alguien la había devuelto. Creí haberla dejado en la caja registradora cuando estaba metiendo todo el bolsas, pero resulta que se me había caído en el parking. Aún así, estaba todo dentro. Parece que sigue habiendo almas buenas en el mundo.




 El viernes no pasó nada. Bueno, tampoco para tanto. Ana trajo de postre el brownie de Oreos más rico del mundo. Por la tarde cayeron cuatro copos de nieve. Ya me imagináis a mí corriendo por la huerta como una niña de cinco años, pero llevo esperando por esto desde Noviembre y nanai. 




 El sábado Lee, Tifanny y yo fuimos a mirar vestidos para PROM. Sé que aún quedan dos meses, pero tenía ganas de hacerme a la idea de las opciones menos malas y decidir si comprarlo en alguna tienda física u online. De la experiencia saqué un vestido largo, azul marino, precioso, que ya veréis a finales de Abril, y que si queréis llevar la indumentaria plenamente americana, más os vale empezar a ahorrar en 1º de la ESO. 

 
No os preocupéis, que el sentido del gusto lo tengo intacto y yo no me pongo estos repollos.


 El domingo safé de ir a la iglesia otra vez y dormí hasta la una y media. La verdad es que estoy muy contenta de que no me obliguen a ir, porque no es para mí. ¿Perder una hora o dos por oír a alguien hablar de cosas que no me interesan cuando puedo estar durmiendo? Sorry, but no. A pesar de todo, es mucho más llevadera que en España, y prometo volver a ir con regularidad pronto.
 Por la tarde tuvimos coro y Youth, aunque solo nos quedamos a cenar porque Angie y yo teníamos cosas que hacer y queríamos ver los Óscars.

 Hoy fue un lunes como todos: aburrido y cansado. Especialmente cansado, la verdad. Este país va a acabar conmigo y no me canso de repetirlo, pero es que yo antes dormía ocho horas como quién se echa una siesta y ahora si llego a las cinco lo considero una buena noche.

 Eso sí, esta semana se presenta interesante y completa: soccer empieza de nuevo mañana. Estoy contentísima, aunque llevo sin moverme el culo del sofá desde otoño y no sé que será de mí. Los entrenamientos me cuadran con Prom Committee, por lo que los martes y jueves serán días muy ajetreados. Por otra parte, mañana hay 90% de posibilidades de nieve así que con un poco de suerte no tendremos clase.
 Creo que no hay mucho más de lo que informar, a parte de que queda poquísimo para Spring Break- lo que significa un viaje a Universal, Orlando- y que ya llevamos aquí más de doscientos días, ¡qué barbaridad!
 Supongo que esto es todo. Nos vemos la semana que viene, y muchas gracias por leerme.
See y'all!


P.D: os dejo un enlace del que podéis descargar mi blog. No conozco los motivos, ni a quién lo ha hecho, ni cómo, pero me ha devuelto en cierta medida las ganas de mantener Bye Home, Hi US! al día. Aquí lo tenéis, ¡ojalá os sea práctico! http://mobincube.mobi/GK38M

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